Buscar en Mundo Jackson

sábado, 28 de julio de 2012

El Profesional.

El bigotudo ex-comisario de policia puso su mejor sonrisa de machote bravucón y miró fijamente a sus captores.

Aquellos dichosos revolucionarios habían logrado triunfar y su amado general se había tenido que largar al exilio, a disfrutar de todo lo robado que había conseguido sacar del país.El ex-comisario  se sentía un poco culpable, él era uno de los responsables de evitar que eso le pasara al general. Pero ya todo poco importaba: sabía de sobra que era un cadáver, ahora sólo quedaba irse de este mundo con un poco de estilo.

-¡Vamos, hijos de puta, pegadme un tiro si tenéis cojones, vengad a todos los compañeros vuestros que me cargué! ¡Ah, como disfrutaba violando antes a las muchachitas!

El joven teniente revolucionario sonrió.

-¡Vamos, comisario, no me haga reír! ¿Cree que vamos a caer en eso? "Provocar al enemigo para que te mate", la mejor solución cuando la cosa está fea, fea y sin escape posible. No, hombre, claro que le vamos a dar matarile, pero a su debido tiempo, primero nos divertiremos un poco.

-¿Qué vas a hacer, pegarme, darme descargas, meterme la cabeza bajo el agua? ¡Me da igual, tengo cojones para eso y mucho más!

-No, comisario, nosotros no vamos a hacer nada de nada. Estas cosas en mejor dejárselas a los profesionales.

En eso momento, como si la última frase del teniente hubiera sido un pie teatral, entró el Profesional.

-Buenas tardes, señores. ¡Hombre, señor comisario! ¡Cuánto tiempo!

El bigotudo ex-comisario no pudo evitar soltar un grito de terror. El resto de los presentes los celebraron con una sonora carcajada.

-¿Qué coñó haces tú aquí? ¿No te habías ido a vivir con los gringos?

-Sí, he fijado mi residencia en los Estados Unidos, pero viajo mucho, es lo que tiene esta profesión.

-Pero...¡Joder, que estos son unos comunistas de mierda! ¿Cómo puedes trabajar para ellos?

-Yo nunca he creído en ideologias, comisario. No son buenas, lo único que hacen es entorpecer la cosas. Yo creo en hacer un trabajo y cobrar por ello.

-¡Eres un vendido hijo de la gran puta! ¡Pensé que eras fiel a nuestros ideales!

-Bueno, no perdamos más tiempo con palabrería. Lamentablemente, en este servicio de hoy no se trata de sonsacarte información, sino de hacerte todo el daño que pueda sin matarte. Estos señores me han pagado cinco horas por anticipado. ¡Deberías sentirte alagado, ya sabes la pasta que eso cuesta! -en efecto, el antiguo gobierno sólo contrataba los servicios de el Profesional en ocasiones muy contadas- Pero basta de palabrería, vamos, de momento, a descalzarte. Voy a empezar con algo que sé que te encantaba...¡Si es que en el fondo soy un sentimental!

El ex-comisario ya ni escuchaba. Estaba demasiado ocupado llorando y chillando presa de un ataque agudo de histeria. Se había hecho caca en los pantalones, pero ni se había percatado, y en unos instantes iba a vomitar.

Había visto a el Profesional en acción.

No hay comentarios: