Buscar en Mundo Jackson

domingo, 12 de agosto de 2012

Carrera (de Taxi) a Ninguna Parte (3).

Después del tercer semáforo atravesado en rojo, saltar de un taxi a toda velocidad dejó de parecer una idea descabellada.

Lástima que la puerta no se abriera.

-¡Je, je, no lo intente, he bloqueado todas las salidas, amigo!

-Pero...¿usted se ha vuelto loco o qué?

-No, los locos son ustedes, por querer seguir viviendo en esta mierda de mundo. Lo único realmente cuerdo que se puede hacer en esta vida es suicidarse.

-Bueno, pues mátese usted solo, pero a mí déjeme bajar, que tengo mujer, dos hijos y una hipoteca.

-¡Menudo favor le hago entonces, seguro que su mujer le pone los cuernos, sus hijos quieren más a la vídeo-consola que a usted y jamás terminará de pagar la maldita casa! Le digo todo esto por experiencia propia.

-Mire, vamos a hacer una cosa: usted pare el coche y vamos a dialogar. Seguro que hay una solución a sus problemas.

-¡La única solución es el batacazado que nos vamos a dar contra un muro de un momento a otro!

-No, espere, espere...¿por qué no nos tira por el puente de la Ronda de la Costa, la caída debe de ser de 30 metros lo menos? ¡Ya que nos suicidamos, que sea con estilo!

-¡Es una idea cojonuda!

-Sí, pero hasta llegar allí, conduzca con cuidado, no vaya a ser que no lleguemos...

-Ahí tiene usted razón. ¡No se nos vaya a fastidiar el gran final por salirnos de la carretera!

-Eso, eso.

De momento, había ganado unos minutos hasta llegar a la Ronda de la Costa. ¿Qué hacer? ¡Ojalá supiera cuánto combustible le quedaba al chalado aquel!

No hay comentarios: