30 Historias para 30 Derechos: Artículo 7.

"Todos son iguales ante la ley y tienen, sin distinción, derecho a igual protección de la ley. Todos tienen derecho a igual protección contra toda discriminación que infrinja esta Declaración y contra toda provocación a tal discriminación".

(-Te digo yo que este tío ni ha "terminao" la carrera).

(-¿Cómo no va se' "abogao"? Si no "ties" el "carne d'abogao", no te prestan el disfraz que ese que lleva puesto).

(-Pues lo habrá "robao", como nosotros los jamones.)

-¿Pueden los acusados dejan de cuchichear?-resonó potente y magistrada la voz del señor juez.

-"Tie" razón. "Usté" perdone, señoría.

-Prosiga, señor letrado.

-Con la venia...Ehhh...¿Por dónde iba?...Ummmm...Disculpe, es que es mi primer caso y estoy un poquito nervioso.

(-¿Ves? Te lo dije. Novato total. Ni pajolera idea del tema. Cinco años por barba no nos los quita nadie).

(-¿Pero cómo nos van a caer cinco años por robar unos jamones, que encima no eran ni de los buenos, si los de los bancos estafadores al año ya están en la calle?)

(-Perra suerte la mía. Pa' una vez que estreno algo, y que tenga que ser el "abogao").

-¡Señor Sánchez y señor Díaz, o se callan o los expulso de la sala!

-Perdone "usté" otra vez, señoría.

(-Joder, mírale. Si es que ni se le entiende de lo deprisa que va).

(-Es que está "cagaíto". Dale un poco de cuartelillo al chaval, "cohone". Y cállate, que el juez se está encabronando y sólo eso nos faltaba...)

(-La madre que me trajo. La próxima vez que robemos en un almacén, de camino atracamos también un banco, y así nos pagamos un "abogaó" en condiciones.)

-¡¡Muy bien, ya es suficiente!! ¡Desalojen a los acusados de la sala!