Paco, el Quiosquero, se gana la vida vendiendo más revistas que periódicos, y algún que otro fascículo, aunque ahora mucho menos que antes. La tecnología tiene estas cosas. Pero no se queja, que también se saca sus durillos con los discos esos que vienen pegados a enormes cartones.
El Padre Cosme es uno de sus mejores clientes, y, sin duda, el más fiel. Todos los días, a primerísima hora (que los curas vivirán como curas, pero ¡cómo madrugan!), cumple con su cita informativa por cuatriplicado.
Sí, ni uno, ni dos, ni tres, cuatro periódicos cuatro que se nos lleva, y cada uno de un color bien diferente del arco iris ideológico.
-¡Oiga, padre! ¿Por qué no se lleva un periódico donde piensen como usted, como hace todo el mundo?
-Porque un periódico está para darte noticias, y una noticia es una verdad que pasea al borde de la piscina de la mentira: no se puede permitir la más mínima inclinación. Así que lo más lógico es leer varios diarios, para que se hagan contrapeso entre ellos y no pierdan el equilibrio.
-¿Me lo explica en cristiano?
-Pues que nadie es capaz de contar la verdad absoluta, todos tenemos amores, odios, deseos, resquemores, prejuicios, miedos...¡Fíjate que hasta Jesús quiso que el testimonio de su Vida, Palabra y Enseñanzas nos lo dieran cuatro puntos de vista y no sólo uno!
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