Plan de Regeneración Democrática de Jackson.

Consta de 8 puntos:

1-¡Basta de parlamentarios aburridos! Que en las listas de los partidos vayan cómicos, malabaristas, imitadores, magos...Apuesto a que el pueblo prestaría más atención a los debates parlamentarios si las intervenciones fueran monólogos de humor, trucos de ilusionismo, o, el colmo, si un político pronunciara su discurso realizando una perfecta imitación de su oponente. Mejorarían el fondo y la forma de su nuestra vida política, créame. En esencia, porque todo mejora si se le da una buena dosis de inteligencia y creatividad.

2-¡Basta de horribles fotos de los candidatos sonrientes en los carteles electorales! Que se ponga una foto de sus glúteos desnudos. Al fin y al cabo, si tan claro está que se juzga a los políticos por su imagen, el votante tiene derecho a disponer de toda la información.

3-¡Basta de servicios tan pasivos! Que se organicen combates cuerpo a cuerpo entre los guardaespaldas de los diferentes políticos (los viernes, por ejemplo), carreras de coches oficiales y eventos de este tipo. Por supuesto, con apuestas de por medio y que el dinero vaya para causas benéficas.

4-¡Basta de corrupción irregular! Que se redacten y aprueben leyes regulando las prácticas corruptas y mafiosas, y que se edite un "Manual de Estilo Corrupto", de obligado seguimiento para todos los políticos. En definitiva: "robar sí, pero con orden".

5-¡Basta de derrochar descaradamente! Que dejen de ponerse morados a manjares caramelizados en los salones de restaurantes de tres estrellas y se los coman en sus casas, que dejen pasar por la puerta principal de los grandes hoteles y entren por la de atrás, que sus vuelos privados no salgan de aeropuertos públicos...

6-¡Basta de traiciones a la patria! Tanto que se les llena la boca con el amor por su país y la vocación de servicio, que cualquier persona que haya sido elegida como parlamentaria nacional no pueda volver a salir de España en toda su vida, y si lo hace, que se le impida el retornar. Y que también sea aplicable a su cónyuge y a sus descendientes menores de edad.

7-¡Basta de falta de preparación! Que haya exámenes sorpresa de los temas más variados en las sesiones parlamentarias, y el que no apruebe, pierda su acta de diputado. ¡Ha, la cara que se le quedaría a más de uno tras verse en la calle por no ser capaz de escribir 1000 palabras sobre Quevedo!

8-Basta en suma de que el ser humano sea un caradura sin la más mínima de las vergüenzas. Con esto, se arreglaba todo.