Ya desde pequeño se interesa vivamente por los mundos del deporte y la creación lírica, aunando ambas aficiones en forma de simpáticos cantos de ánimo y vítor en los partidos del equipo de futbito de su cole. A esta primera etapa, de clara influencia de autores anteriores ya consagrados, pertenecen sus canciones: "Hala, Corazonistas; vamos, corazonistas; ra, ra, ra" y "Tenemos un portero que es maravilloso, se para los penaltis metido en un foso".
En 1991, Gril Brioscosa visita el Reino Unido, donde tiene posibilidad de entablar contacto con los grandes maestros anglosajones del canto de estadio. Vivamemente impresionado por dicha experiencia, a su regreso compone su primera gran obra: "Nunca os dejaremos vendidos, campeones", estrenada por los alumnos de 2º de BUP en el duelo de máxima rivalidad con las Escuelas Pías de Bercinuño.
Poco después, ingresa en el fondo ultra de la Unión Deportiva Brisca, el equipo de su pueblo, dando comienzo un periodo de intensa creación, que incluye obras tan destacadas como: "Unión, Unión, serás campeón" o "Brisca, Brisca, oe, oe, oe!". Es en esta época cuando comienza a ser conocido por su simpático alias, debido, en palabras de su creador, "A que tie una cara cerdo que espanta".
En 1994, se integra en los Ultra-Radikal-Mad-Boys, del equipo de su capital de provincia. Comienza su momento de mayor esplendor poético y fertilidad creadora, componiendo más de 300 obras. Es un periodo caracterizado por su hondo sentir por sus colores, su brillo metafórico y por la cantidad de tacos que decía y lo faltón que se puso. A esta etapa corresponden: "Arbitro, tu madre vende su cuerpo todo el rato y lo vende barato", "Fútbol y cerveza, de cabeza, de cabeza" o su creación más universalmente conocida y, acaso, mejor: "Me cago en tus colores, paleto de mierda".
En 2002, se da cuenta de que todo eso de ser un ultra es una soberana tontería, deja el fondo del estadio y de escribir, se casa y comienza a trabajar en un banco.
Los más grandes han versionado al "Porcinaco". Aquí vemos a Diego y su deliciosa intepretación de "Sin disimulo, os lleváis metíos cinco dentro'el culo."
(Como mezclo en este blog tanta realidad curiosa con pamplina fruto de mi imaginación calenturienta, aclaro, por si acaso, que toda coincidencia de esto de hoy con la realidad es pura coincidencia).
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