Buscar en Mundo Jackson

sábado, 22 de septiembre de 2012

Hasta Ayer, Amigo.

El avión se detuvo definitivamente y los motores emitieron su característico suspiro al apagarse. Billy dio un profundo soplido de alivio. Ya estaba, se había acabado la guerra -al menos para ellos dos-, se iban a casa, cada uno a la suya -a miles de kilómetros la una de la otra-. Por fin.

A su lado, su copiloto se quitó el casco y se secó el sudor con la mano, sin mirarle. Aquella guerra era un esfuerzo conjunto de los dos países, y las altas esferas se habían empeñado en que hubiera el mayor número posible de tripulaciones mixtas.

Durante los últimos meses, era la persona de este mundo a la que Billy se había sentido más unido. Habían pasado miedo -mucho- juntos y nada hermana como eso. Ahora, seguramente no se verían más en la vida.
Esas son las despedidas más duras, las de las personas por las que uno jamás lo dejaría todo, pero se queda un poco con las ganas.

Su copiloto era un gran tipo. Le había escuchado cuando lo necesitaba, le había apoyado, le había animado, y ahora todo acababa así, de golpe. Cada uno a seguir con su vida, cada uno por su lado.

Mientras Billy comenzaba a atender al papeleo junto a un mecánico, su copiloto le tocó en un hombro y le dijo: "Ahora te veo", al tiempo que se encaminaba a los barracones de las oficiales. Billy se limitó a emitir un gruñido de asentimiento.

Veinte minutos después, Billy entró en la sala de su escuadrón.

-¿No ha llegado mi copiloto? -le preguntó al oficial de guardia.

-Sí, vino con mucha prisa, recogió sus cosas y se fue.

-Ya.

Billy se dirigió a su asiento, perfectamente reconocible porque siempre dejaba su cazadora en el respaldo. Sólo que aquella no era la suya.

Era la de su copiloto. No le pilló de sorpresa.

Billy se puso la prenda de su amigo de armas y salió a dar un paseo por el aparcamiento de los aviones. En aquellos meses, su copiloto y él había llegado a conocerse muy bien. Billy sabía que a él tampoco le gustaban un pimiento las despedidas.

En fín, mejor así. Mucho mejor.




No hay comentarios: