-¡Toma, Brady!
-¿Qué es esto?
-Lo que me pediste.
-Pero...¡Si esto no son más que piezas sueltas!
-Exacto, y un libro. Las piezas están todas y el libro te explica cómo se monta la radio.
-Pero, ¿de dónde ha sacado esto?
-Lo he comprado en una tienda.
-¿Y con qué dinero se supone que voy a pagarle?
-Tú aprende a armar radios. Luego te traigo más juegos de piezas para que las montes y se las vendas a otros internos, y con ese dinero me pagas.
-¡Pero el trato no era este!
-¡Tranto!, ¿qué trato? ¡Si te hubiera traído una radio vieja y rota no la habrías arreglado ni en mil años! Con esto, en cambio, con un poco de suerte puedes que logres algo en dos o tres.
-¿Por qué hace esto por mí, agente?
-Pues la verdad es que no lo sé, no me he parado a pensarlo.
-Bueno, pues...Muchas gracias.
-Vaya, veo que no se te ha olvidado cómo se pronuncian esas palabras.
-Ya....Me parece que llevaba muchos años sin pronunciarlas.
-Quizás porque hace años que no tienes nada que agradecer.
-Quizás.
-¡Hala, basta de palabrería y ponte a trastear con esas piezas!
No hay comentarios:
Publicar un comentario