Cuando la violencia no ponía violento.

¿Más nostalgia, Daniel? Puede.

Esta escena de la película "Y si no, nos enfadamos" los de mi quinta la hemos visto unas 500 veces. En primer lugar, porque alquilamos la película y nos la tragamos una y otra vez (no había 100 canales, no había Emule, ni siquiera había forma humana de copiar películas...o video-club, o nada). Era la época en que algún iluminado decía que, por culpa del vídeo, los cines desaparecerían antes de terminar la década de los 80. Luego, llegó Tele Cinco, y se dedicó a poner las películas de Bud Spencer y Terrence Hill de manera compulsiva, y gracias a esto, vimos la peli una y otra vez, otra vez.

Si, Terence Hill y Bud Spencer (tanto monta, monta tanto). Los reyes de la carcajada infantil a fuerza de mamporros. En aquella época, ningún sesudo contertulio decía "estas películas que hacen apología de la violencia gratuita son perniciosas para la juventud". Las veías y ya estaba. Sabías que eso no real, sabías que en las peleas de verdad había sangre y huesos rotos, y que lo mejor era evitarlas. Éramos niños inocentes, pero no gilipollas.



Y, mire usted por donde, no nos volvimos violentos. No vamos por ahí matando gente. Recuerdo, incluso, haber visto Rambo con 12 añitos y aquí me tienen, sin las más mínimas ganas de acribillar a uno del viet-cog.