Exacto. Basta con dar algo gratis para que las gentes se agolpen como niños de posguerra ante un vehículo militar norteamericano. Todos al grito de "¡dame, dame, dame!". Da igual que se trate de un zumo o un balón de playa, lo importante es que lo regalan. No nos preocupa empujar o ser empujados, dar un codazo o que nos den una patada. Hay que conseguir la muestra gratuita, es puro instinto de supervivencia, es la ley de la selva.
Luego, mientras emergemos de la lucha con la orgullosa sonrisa presidiéndonos la cara y tres cajas de botecitos de sopa entre los brazos, el aguafiestas cabrón de nuestro niño, ese por el que hemos peleado a muerte cada muestra de producto, nos suelta: "A mí la sopa no me gusta, papa. Y a ti, tampoco".
(La madre que lo trajo).
"Dan una cinta de esas pa' colgarse el móvil. Yo me he cogido ya cinco".
"Música a cuento de..." pelear por los regalos, como si de pobres vagabundos se tratara. Y el Vagabundo por antonomasia siempre será Charlie Chaplin. Esta simpatiquísima canción ("Je cherche après Titine") pertenece a "Tiempos Modernos" y la compuso Léo Daniderff.
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